martes, 4 de diciembre de 2012

Si hablamos de amor...

Si hablamos de amor, por que no hablar de odios...Odio a las instituciones que en nombre de la religion, la política, la economía, el sector social o el deporte generan fanatismo... Considero al fanatismo como el mejor representante de nuestra estupidez humana. Odio las palabras no dichas a tiempo, la represión por búsqueda de aceptación, la vagancia y mediocridad de algunos impunes que se hacen llamar profesionales, odio los docentes incapaces de dejar crecer a un alumno, odio las miradas cómodas, odio la expresión tibia de afecto, odio a los padres abandónicos, odio a los esclavos de las apariencias, odio el plástico, la necedad, la violencia. Odio al paco,  a los abusos...A la cana que se queda quieta cuando  nuestros pibes, los hijos de todos, maltratados por un sistema que los margina que les da tortilla de paco, guiso de paco, y un habitat sin recursos de salida, se nos mueren, por  de falta de afecto, estructura,  reconocimiento y salida.... Odio que traten a la gente que como si fuera mierda, a todos los inhumanos que dicen. " Estos ya no tienen vuelta atràs, hay que matarlos a todos", a todos los fachos del mundo, a todos los torturadores del mundo, a todos los que domestican en nombre del amor, a todos los que se creen con derecho a violentar a otro ser, a todos los hijos de puta capaces de generar una guerra. Y no hay mayor simbolo de la idiotez humana que una guerra. Odio a todos los desquiciados enfermos que se creen que tener un perro es tenerlo atado todo el dia, odio a todos los que maltratan animales. Odio a la manipulación farmacéutica, odio la trata de personas, la prostitución y a las clientes que creen que el sexo y las caricias pueden tener precio. Odio a los perversos, y puedo seguir asi toda la noche... Por que siempre consideré al odio como un gran motor creativo que me impulsa a seguir escribiendo, filmando, hablando y creando cueste lo que cueste...

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